martes, 24 de noviembre de 2009

Playmaker (... o un poema sobre basket).



La mirada alta, y concentrado
el gesto.

El salto seguro
y la finta
elegante, que deja
al otro confundido.


El círculo girando sobre su propio eje
suspendiendo el tiempo y las miradas
y el finísimo chasquido victorioso
que palpita en esas manos agitadas
ávidas de furia y de sonidos.

Esa mirada de lince que luce el playmaker
busca cómplice
un raudo batir de alas
para asomarse al balcón de los descuidos
y servir un buen cóctel de asistencias.


La cabeza alta, y concentrado
el gesto,
buscando,
encontrando
soluciones a las tramas
matemáticas impuras:
tableros, estadísticas, pizarras.

Sueña el playmaker con segundos finales
-diez, nueve, ocho, siete ... -
y un mínimo latir de relojes
extasiados
ante la maravilla de un pase
-seis, cinco, cuatro ... -
la finísima, o enésima finta
o el tiro aquel que paró un instante
-tres, dos, uno ... -
el tiempo
de las vidas
de unos pocos.

2 comentarios:

María Socorro Luis dijo...

Hola.
Quiero darte las gracias por tu visita. Estoy merodeando por tu espacio y creo que nuestras poéticas, tienen bastante en común.
Nos seguimos viendo ?

Saludos poéticos. Soco

JACKIS dijo...

vaya veo que compartimos nuestro baloncesto demas esta tu poema