lunes, 28 de noviembre de 2011

(Re)nacimiento


(A Amelia Díaz)


Allá quedaron
ilusos los naufragios
las cometas
sensatas en su ruina
y pálidos noviembres.

Ahora escribes
con timón
al desembarco
rumbo a un mar
que quiso
ser eterno.

Y yo no sé
en qué oportuno lugar
liberas tus mareas.

Ya tomaste con estruendo
las riendas y los remos
y es un viento en las velas
el que peina los trigos
soñados de tu paisaje.


jueves, 24 de noviembre de 2011

Versos reclusos



El calor
en sus ojos.


No hay virutas de humo
en la alegoría que es
un poniente de versos.


Mi calor y sus ojos
rondando el devenir de una estrella.


¡Qué flor extensa
de vida inacabada!
¡Qué rectitud insumisa,
qué lineal desgana!
¡Qué desprecio de puertas
en la vertical herida!


En los ojos
un calor de ofrenda,
una rosa sin vientos
que la aclamen,
un destierro protector
sin alas, un desgarro.


Los colores cálidos
planean un paisaje.
La vanidad no tiene
sudario que la envuelva
en los pasillos sin fin
de la incrédula memoria.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Minutos musicales: Lila Downs, "Corazoncito tirano"




Todo en Lila Downs es puro mestizaje, su nombre, su familia (madre mixteca y padre norteamericano), sus estudios (en Minneapolis y Oaxaca), sus idiomas (castellano, inglés, maya, zapoteco) ... su música. Si tuviera que quedarme con uno sólo de sus discos, elegiría Border. La linea (2001), con canciones de temática social inspirada en la vida a ambos lados de la frontera. A nivel musical incluye ritmos jazzisticos, hay folk americano, hay boleros y rancheras, y está la canción que presento aquí: Corazoncito tirano, composición de Cuco Sánchez, transformada por Lila Downs en un blues abolerado (permítanme la licencia) con guitarra eléctrica omnipresente, y la voz de Lila, toda sentimiento, desgranando versos de desamor. Una mujer, toda sabiduría, licenciada en canto y antropología social, que transmite el orgullo de ser mestiza. A seguir.


viernes, 18 de noviembre de 2011

Línea de costa

Ya no quiero
la escafandra.

........................... Arraigo
en el arrecife.


Íntegro me muestro.

....................................... Buceo
sin alquimia

solo
el movimiento
de brazos.



Mar afilado.

Cuerpos que se ensamblan.

Médula en la médula.

................................................. Quiero.





martes, 15 de noviembre de 2011

Versos (con)versos


Vuelve el verso duro
como escama de celacanto.
Vuelve el tapial adverso,
el marasmo, los muelles
contrabandistas, la moneda varada
tótem del nuevo siglo.

Vuelve la apatía a los brazos
como fútil resistencia. Es
el ruido de fondo en los templos:
la rabia petrificada, la química
impuesta a contramano.

Escupen las rotativas
datos de sutil paranoia, las cárceles
presienten la utilidad de un poema.
Atropellos atardecen y cuerpos
que intentan inventar una orilla.
Metales pesados como piezas
de un mecano deslizan su gesto
de plomo en las vísceras de los peces.


Y el cielo tan azul tan promesa
en mi ventana la luna botón
de plata en mi noche tan tú
enroscada en mi pelo preso.
Y tus límites me expanden
a clandestino año luz ámbar
en tus cenizas desembarco con prisa
de reloj y abandono tendré que aprender
a apresar tu momento rotundo.



sábado, 12 de noviembre de 2011

Blanco / Frío


las baldosas
emergieron lívidas
insensibles al abrazo

un airbús rasgó la cuerda
del último latido
que iluminó prematuro
de ceros la estancia
dejando espuma
en las cicatrices
y ojeras
en los armarios

los hombres disecados
pidieron la cuenta
de los tumores recetados
tras los cristales ungidos
de ampollas en el café

las palabras
ahuyentadas
regresaron a los libros
a su pulcra tibieza de tinta
y papel que las concluye

blanco como sala de espera
yacía el sol naftalina

es la muerte una extraña
pareja de baile






...




jueves, 10 de noviembre de 2011

Fin y principio, un poema de Wislawa Szymborska


Después de cada guerra
alguien tiene que limpiar.
No se van a ordenar solas las cosas,
digo yo.

Alguien debe echar los escombros
a la cuneta
para que puedan pasar
los carros llenos de cadáveres.

Alguien debe meterse
entre el barro, las cenizas,
los muelles de los sofás,
las astillas de cristal
y los trapos sangrientos.

Alguien tiene que arrastrar una viga
para apuntalar un muro,
alguien poner un vidrio en la ventana
y la puerta en sus goznes.

Eso de fotogénico tiene poco
y requiere años.
Todas las cámaras se han ido ya
a otra guerra.

A reconstruir puentes
y estaciones de nuevo.
Las mangas quedarán hechas jirones
de tanto arremangarse.

Alguien con la escoba en las manos
recordará todavía cómo fue.
Alguien escuchará
asintiendo con la cabeza en su sitio.
Pero a su alrededor
empezará a haber algunos
a quienes les aburra.

Todavía habrá quien a veces
encuentre entre hierbajos
argumentos mordidos por la herrumbre,
y los lleve al montón de la basura.

Aquellos que sabían
de qué iba aquí la cosa
tendrán que dejar su lugar
a los que saben poco.
Y menos que poco.
E incluso prácticamente nada.

En la hierba que cubra
causas y consecuencias
seguro que habrá alguien tumbado,
con una espiga entre los dientes,
mirando las nubes.
 

Wislawa Szymborska
De "Fin y principio" 1993
Traducción de Abel A. Murcia

lunes, 7 de noviembre de 2011

2'38 a.m.


Tengo mi hebra dormida

en una boca de pantera
augusta en su linaje cotidiano
de selvática avaricia.

Vierto un caudal remoto
-río blanco de lava inerte,
juego sin reglas ni artificio-
en mi torvo perfil de desertor.

Abandono las hélices indemne
escribo con manchas en mi ombligo
palabras de abandono que publico
sin prisa, más tarde, en este lugar.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Viaje



Cuando el tiempo no tenía aún certeza
y la nieve hilaba su rostro bisiesto,
viajar en el ala de un día era un asombro.
Me vencía la noche y su inmanencia,
su prisa de corola y su banquete.
Y los ríos se anunciaban verticales
con los cuerpos enteros, las maderas
sin permiso y el sexo veloz como promesa.

Hoy sueño con los que no están y fueron,
con los que están y no son.
Todavía me quema aquel enigma
de saber si somos, tan solo,
la locura pertinente
de ese tiempo que no espera.



jueves, 3 de noviembre de 2011

Lenguajes

Puede que tuviera que afinar los sentidos
ante sus frases tan bien construidas.
Posiblemente mi silencio azuzó el lenguaje
de sus textos gramaticalmente impecables:
los sustantivos,
tan bien ilustrados,
las oraciones,
subordinadas con sus verbos
en la adecuada persona
puliendo los detalles
de este ingenuo desamor.
Sus tesis impolutas
ante mi incapaz
huida hacia ningún
lugar finalmente aceptable.
El arrojo en la intemperie,
un instante de lujuria
infantil en el sollozo
fatalmente entendido.
Los lugares comunes
que no quieren serlo.
Tal vez el temor
de ser el primero
en fundirse
como pan en el abrazo
que dejó un tiempo dudoso
y una única verdad,
la suya,
la mía.
Los textos interpretables
desde los lazos fungibles
con que nos han codiciado.

Puede que las horas se alíen
con mi temporal deshielo
y ardan constelaciones
que remuevan
los bordes de la sombra.
Llevarán un delirio las noches
adosado a mi segura compraventa.
Y en su armario, fielmente adaptado
a la múltiple función del desaliño,
habrá un lugar para mis ropas,
eso lo sé, lo llevo en los asientos
del circo que recorre las ciudades
que dibuja con líneas en el atlas
enciclopédico de mi coraza palpable.

Me desvisto del lenguaje superfluo.
Me desnudo ante su verbo,
esencial sintagma que me vive.


...