Yo
era un hombre nuevo después
de una tarde de domingo abril
borrosa y soleada
yo era
de nuevo un hombre
tumbado en la camilla
todo para tus manos
ansia de boca en tu cuándo
en tu no verte y gemir distancia
y vuelo a diez mil metros al norte
del período azul
de los muertos extraviados en hilera
de todas las cosas inútiles
y de todas las ventanas que nos cercan
en este día de hoy
trece
de algo
de nosotros.
de una tarde de domingo abril
borrosa y soleada
yo era
de nuevo un hombre
tumbado en la camilla
todo para tus manos
ansia de boca en tu cuándo
en tu no verte y gemir distancia
y vuelo a diez mil metros al norte
del período azul
de los muertos extraviados en hilera
de todas las cosas inútiles
y de todas las ventanas que nos cercan
en este día de hoy
trece
de algo
de nosotros.
2 comentarios:
Y yo, y yo también después de leerte, querido Eloy...
Y para mi un gustazo tenerte como lectora Sofía.
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