Como aquel gusano que construye en tu cocina
cuentas de cuscús que son collares sin atar
y sabe de su súbita esencia inacabada
de arena enjaulada en el reloj, así
diseño los puentes que han de llevarme
a tu ribera de huerta feraz y ebrio continente.
Las trizas astilladas de mi espejo reclaman en tu cuerpo
la cuota pertinente de porqués sin preguntar,
pero ignorando la pena que equilibra al artrópodo,
su gregaria tristeza de subterránea blandura, las palabras,
las miradas, el lenguaje no verbal de los autómatas,
nos imponen inventar una novel taxonomía
en la que ser y estar, como estrategas de guardia
en esa farmacia emocional que otros llaman vivir.
13 comentarios:
jolín, te sales, Eloy... feraz, pero feraz de verdad.
Beso entomológico, creo que no farmacológico, ...al menos sé que no huele a farmacia, que odio ese olor..:)
Bravo Eloy, poema de largo aliento y profunda huella.
Un abrazo.
Leo
ese remate final del poema salio muy bien .... "esa farmacia emocional que otros llaman vivir".
Eloy, me ha encantado.
Un besico.
...a tu ribera de huerta feraz y ebrio continente...un señor verso y un señor poema. Esa farmacia emocional está repleta de sustancias. Algunas curan, según la medida, y otras, además, enganchan. Un saludo.
Gracias, Eloy, por su generoso comentario. Su poesía está llena de vibraciones y, lo que es muy importante, de sinceridad.
Un abrazo desde Madrid.
Sofía, me gusta eso de te sales. Feraz... y un poco feroz, me gustan las palabras que acaban en z. Un beso.... lógico.
Leo, gracias por tu fidelidad. Tengo muy en cuenta tus comentarios. Un gustazo tenerte por aquí.
David C., bienvenido, gracias por tu comentario.
Sara,¡que alegría volver a saber de ti! Y a mi me encanta que te encante.
Besicos también
José Baena, en el fondo somos química, eso son los sentimientos, reacciones a estímulos, fisiología emocional.
un saludo
Gracias Antonio, por su comentario, que viniendo de quien viene, considero muy importante para mi. Uno intenta encontrar una voz propia, y en el camino está.
Un abrazo mediterráneo.
Eloy, lo he releído unas cuantas veces y sin duda es un poema maravilloso, extremadamente profundo, de esos que algún día me gustaría. Es un lujo leerte.
Quise escribir: "algún día me gustaría escribir a mí"
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