lunes, 17 de junio de 2019

Tarde


Siempre es demasiado tarde.
Llego a la playa y la playa no está.
Los turistas cambian de sombrero.
En sus panzas rebosa una mentira.
Dentro de este silencio hay otro silencio.
El viento rompe la estadística de las nubes.
Una mancha inmensa gris es el cielo.
Esta hora tiene un último minuto.
El árbol de la vida aún me cobija.




1 comentario:

Voz en off dijo...

Yo también llego tarde a muchos sitios, pero cuando voy a la playa el mar sigue allí , aunque a veces el sol ya se ha ido!