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Intentemos el amor.
Frente a la molicie
transparente,
inútil
de un verso,
el beso,
todo luz,
detalle ovalado
en el erial del mundo.
Provoquemos el acto,
una fugaz rebeldía,
las manos
que encienden
e incendian
el páramo ciego.
Un suspiro voraz
se atrinchera
ante el conformismo.
Intentemos el amor.
Conjuguemos el verbo
de los cuerpos.
Arrasemos la belleza
hasta agotarla,
libres ya de la culpa
que sustenta
la carnal teoría
del pretexto.
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Maravilloso Eloy, me encanta, lo he leido tres veces ya.
ResponderEliminarBlogger no me deja comentar con mi perfil, no se, ultimamente me da problemas en algunos blogs, asi que te comento como anónimo.
Un abrazo
Paz
"Intentemos el amor... en el erial del mundo".
ResponderEliminarQué algo mejor podemos intentar?...
Precioso, Eloy.
Muxutxo.
"Arrasemos la belleza
ResponderEliminarhasta agotarla,
libres ya de la culpa
que sustenta
la carnal teoría
del pretexto"
Sencillamente brillante tu poema, pero esta frase es para enmarcarla.
un abrazo.
Gino
Copio al detalle el comentario de Gino.
ResponderEliminarEstupendo, Eloy.
Enhorabuena.
Leo
Y sin embargo el verso sublima el amor, y el amor sublima el verso. A veces parecen cómplices de algún plan común. Me ha gustado este poema, el ritmo que los versos breves le imprimen y esas proposiciones que comparto plenamente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Casi siempre el verso es inútil, aunque algún beso ha caído gracias a ir de poeta.
ResponderEliminarUn abrazo
Sí, intentemos el amor. Hay tanto que ganar en ello.
ResponderEliminarUn poema esplendido.
Recién llegado a tu blog, recibe un cordial saludo.
Es precioso tu poema. Siempre se debería intentar el amor. Así, con suerte, se conseguiría con más frecuencia.
ResponderEliminarBesicos.
No dejo de impresionarme, Eloy. Adhiero a los comentarios anteriores, me fascinan tus poemas. Son fuertes como una torre, indestructibles. ¿Tiene Ud. idea de la magia que tiene su pluma?
ResponderEliminarAbrazo.